Cigarrillos

Una especialista advirtió sobre los riesgos que corre el ser humano cuando se inicia en ese hábito desde muy joven. Algunas pistas para pensar cómo salir del problema.

El Instituto del Buen Aire, con sede en San Lorenzo 2575 de la ciudad de Santa Fe, es un centro especializado en el tratamiento del tabaquismo que cuenta con un equipo multidisciplinario dedicado a tratar esta grave enfermedad. Un importante número de profesionales (médicos especialistas en medicina respiratoria e interna, psicólogos con experiencia en el manejo de adicciones, psiquiatras, rehabilitadores físicos, terapeutas ocupacionales, etc.), trabajan en forma personalizada con el paciente de acuerdo a la problemática específica del mismo, para que éste pueda abandonar su adicción.

El tratamiento ofrecido apunta a una solución enfoque integral del problema, realizando intervenciones en todos los niveles de dependencia (física, psíquica y social), que presenta el tabaquismo.

Se tratan todas las cuestiones relacionadas con la adicción a la nicotina, sin dejar de lado los aspectos psicológicos que llevan cada persona a fumar, como así también los que surgen del ámbito social de cada individuo. Estos aspectos son considerados inductores o facilitadores del consumo de cigarrillos y, por lo tanto, deben ser contemplados siempre en el tratamiento.

El tabaquismo es la principal causa de muerte evitable en países en vía de desarrollo y es el origen probado de más de 25 enfermedades mortales o discapacitantes. Los cánceres de pulmón y laringe, las enfermedades cardiovasculares y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, representan el 54% de la carga total de las enfermedades de América Latina, todas ellas relacionadas con el consumo de tabaco. Se calcula que para el 2020, el cigarrillo producirá más muertes que el SIDA, los accidentes de tránsito, homicidios, suicidios, alcoholismo y drogas ilícitas juntos.

Los productos del tabaco son adictivos para la mayoría de los fumadores, ya que el fumar condiciona tres tipos de dependencia: física (causada por la nicotina), psíquica (relacionado con los motivos que llevan a la persona a fumar) y social (relacionado con el ambiente del fumador, que pueda facilitar que éste siga fumando).

En nuestro país, fuma el 36% de la población, y se calcula que a los 14 años de edad puede iniciarse la adicción. Por todo esto, el tabaquismo es un problema que debe ser enfrentado y combatido en un medio idóneo y con profesionales preparados para tal fin.